Los destinos Europeos e internacionales molan, lo sabemos. Pero, a veces, no hace falta salir del país para encontrar lugares espectaculares. Existen muchas ciudades españolas llenas de encanto que nos pueden ofrecer, igualmente, unos paisajes y monumentos que están a la altura de las urbes más cosmopolitas de otros países. Además, viajar dentro de nuestras fronteras tiene un pro bastante grande: el coste. En total nos va a salir más económica una escapada a un destino nacional que a uno internacional y podremos ahorrar durante nuestras vacaciones. Más aún si sabemos qué ciudades españolas visitar y cuáles resultan más económicas para hacerlo.

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Ciudades españolas baratas para viajar

Hemos querido hacer una recopilación de 5 ciudades de España que son geniales para hacer una escapada, ya sea en familia o con amigos. Son ricas en patrimonio histórico y cultural, así como en ofertas de ocio. Aunque lo mejor, sin duda, es su precio: muy económico tanto en alojamientos como en actividades para hacer en el destino.

Córdoba

Esta ciudad rebosa arte. Lo mejor es visitarla en abril o mayo porque habrá menos turistas y se podrá disfrutar de la ciudad de manera más tranquila. También será posible, durante esos dos meses asistir a alguna de las procesiones, disfrutar de las romerías y ver los bonitos patios cordobeses con las flores en su máximo esplendor.

Su legado cultural es amplio. Destaca, sobre todo, la conocida Mezquita-Catedral y las construcciones que la rodean. Se puede visitar de forma gratuita a primera hora de la mañana. Otros lugares de interés para ver y que también son gratis por la mañana, son el Alcázar (durante el resto del día cuesta 4 euros) y los baños del Alcázar Califal. La Medina de Azahara es lo que queda de una población árabe que hubo a las afueras de Córdoba. Es algo que gusta mucho a los viajeros. Por cierto, ¿sabías que el casco histórico de la ciudad es el segundo más grande de Europa?

Para comer, la mayoría de los locales cordobeses ofrecen buenos menús a precios muy competitivos. Por ejemplo, el bar Miguelito (entre la avenida de Cádiz y la plaza de Santa Teresa) sirve platos tradicionales abundantes y sus menús oscilan los 10 euros. Otra taberna muy conocida y antigua es la de Rafalete. Ya tiene 50 años y cuenta con varios locales abiertos. Su menú es de 12 euros por persona y los platos más demandados son el rabo de toro, los cogollos al ajillo y los pinchitos.

Cuenca

Desde que Cuenca está conectada con Madrid vía AVE se ha convertido en una ciudad mucho más visitada. Los turistas disfrutan aquí paseando por sus callejones de piedra, visitando la catedral de Santa María y San Julián y admirando las famosas casas colgantes. También es un destino muy querido por los amantes de la naturaleza y por aquellos que practican deportes al aire libre: tienen a su disposición la bella Ciudad Encantada y la sierra de la localidad.

Se habla muy bien de la gastronomía de Cuenca: de calidad y a buen precio. Son habituales las recetas con carne, sobre todo de cordero y cerdo, cocinadas al horno o en caldereta. El morteruelo, los zarajos, las migas con huevo, el ajo arriero, el gazpacho pastor y el mojete son platos muy típicos de la localidad. Se pueden degustar en la mayoría de sus restaurantes, por ejemplo en Olea Comedor (calle Colón, 54) o en Raff San Pedro (en la calle San Pedro), que es un local muy chulo con paredes de piedra, a modo de cueva.

Logroño

Una casita rural en algún pueblo de Logroño con vistas a la montaña puede ser el alojamiento perfecto para una pareja. Durante el día se puede ir a la ciudad a disfrutar de una cata de vinos en alguna de las numerosas bodegas y dar luego un paseo por la vera del río Ebro. En este itinerario se puede ver el puente de piedra, muy característico en la ciudad y conocido también como Puente de San Juan de Ortega. Otra opción es ir a ver  la concatedral de Santa María la Redonda y sus torres gemelas (aunque ni es redonda ni tiene torres iguales).

Para comer, es uno de los destinos más económicos de España. Los locales de la calle Laurel gozan de buenas críticas en cuanto a su relación calidad-precio. Allí se pueden degustar las tapas típicas: tortilla, bravas, champiñones…

Ávila

Otro destino chulísimo español es Ávila. Por supuesto, lo más famoso es su muralla. Tiene un perímetro de 2516 metros y se mantiene completa a pesar de su antigüedad; es de los casos más excepcionales del mundo. Visitar la muralla paseando por su parte superior es posible en un tramo, el precios es de 5 euros, pero los martes a mediodía es gratis.

Un lugar que hay que visitar sí o también en la ciudad es el monumento de los 4 postes. Está a las afueras, cruzando el río Adaja, y desde él se ve una panorámica de Ávila que impresiona, rodeada toda ella por la muralla.

Ávila es un destino perfecto para los amantes de la historia, pues son muchos los edificios de carácter histórico que se pueden visitar en la ciudad: el Palacio de los Polentinos, la Catedral del Salvador, la Basílica de San Vicente,  el Convento de San José…

Y, ¿qué hay de las gastronomía? Es excelente. Quien quiera probar un buen chuletón de Ávila deberá ir a Los Candiles (calle Pedro de Lagasca, 5), un local de aspecto acogedor que sirve comida típica abulense. También goza de buenas críticas el restaurante Siglodoce, que tiene menú degustación a muy buen precio y está a los pies de la catedral.

Salamanca

Queremos cerrar la lista (que podría ser mucho más larga porque hay cantidad de ciudades españolas preciosas y económicas) con la ciudad de Salamanca. Fue reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1988 y es famosa por sus monumentos y Universidad, que es la más antigua del país. Los lugares que más visitas reciben de la ciudad son la mencionada Universidad, las dos Catedrales (la Nueva y la Vieja) y la Plaza Mayor. No obstante, hay muchos más edificios que bien merecen una visita: la Casa Lis, la Casa de las Conchas o el Convento de San Esteban.

En cuanto a la gastronomía, en Salamanca se pueden probar platos muy variados. ¿Qué debes probar antes de marcharte? La lenteja de la Armuña y el vino de las Arribes, exquisiteces salmantinas. Realmente la ciudad ha conseguido postularse como una de las principales exportadoras de embutidos y carnes, destacando entre ellos el jamón de Guijuelo y la carne de morucha. Un restaurante muy alabado que sirve todo tipo de embutidos y vinos es el Vinodiario (en la Plaza de los Basilios); otro que también tiene buena fama es Mencia (calle Grillo, 11), donde destacan sus recetas con bacalao.

Estas son 5 de las ciudades españolas más baratas para hacer una escapada. ¿Por qué no visitarlas todas, por ejemplo, a lo largo de este año? En coche se llega en un rato y puede ser una enriquecedora y bonita experiencia. ¡A disfrutar!