Hay destinos que, al visitarlos, parece que hayas entrado en un mundo mágico. La región de Alsacia es, sin duda, uno de estos lugares. La encontrarás en la frontera franco-alemana. Sus ciudades más famosas son Estrasburgo y el magnífico Colmar; sin embargo, son muchos más los pueblos de Alsacia que enamoran con su encanto y belleza. Hemos seleccionado 10, no dudes en conocerlos a continuación: te van a encantar?
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Los pueblos de Alsacia con más encanto
1) Eguisheim
Al sur de Colmar se encuentra este pueblo medieval cuya particularidad reside en su original arquitectura. Disfrutarás paseando por los callejones entre las muchas casas con entramados de madera y contemplando la gama de colores de los edificios. Eguisheim es también un pueblo lleno de flores y fuentes que hacen las delicias de los aficionados a la fotografía. No te pierdas la hermosa capilla de estilo neorrománico de Saint-Léon.
Los amantes del vino también encontrarán la felicidad, pues Eguisheim tiene muchas variedades de uva de calidad, como el Grand Cru Eichberg o el Grand Cru Pfersigberg. Con todos sus atractivos, no nos sorprende que Eguisheim fuera elegido como el pueblo favorito de los franceses en 2013.
2) Riquewihr
Su hacer la Ruta del Vino de Alsacia llegarás hasta la famosa ciudad de Riquewihr. El lugar es conocido por sus vinos, por supuesto, pero también por su arquitectura, sus balcones floridos y sus patios pavimentados. Riquewihr aún mantiene vestigios de su época medieval. Podrás retroceder en el tiempo visitando el castillo de Württemberg, los numerosos museos o la Torre de los ladrones.
3) Hunawihr
Se encuentra en el Alto Rin y lo que más llama la atención son sus fantásticos paisajes naturales. Verás viñedos hasta donde alcanza la vista. Hunawihr es el lugar perfecto para relajarse y disfrutar con calma del campo. Son reconocibles sus casas con entramados de madera y su iglesia. No dudes en visitar el Butterfly Gardens, ¡un jardín lleno de mariposas! Si te gustan los animales, ve al NaturOparC, un parque de reintroducción de animales con cigüeñas y nutrias.
4) Mittelbergheim
Continuando la Ruta del Vino, encontrarás otro de los precios pueblos de Alsacia. En el patrimonio de Mittelbergheim tiene mucha presencia la producción de vino, especialmente gracias a su Grand Cru Zotzenberg. Podrás pasear entre las casas de viticultores, edificios que datan del renacimiento y las antiguas prensas, así que es un destino ideal para amantes del vino y de la arquitectura. En 2018, este pueblo quedó segundo en la lista de Pueblos favoritos de los franceses.
5) Hunspach
Casas de madera, ventanas blancas con flores, tejados nevados en invierno… Hunspach tiene un encanto único. Además de ser un regalo para los ojos, la ciudad hará las delicias de los aficionados a la historia con la fortaleza de Schoenenbourg, en la Línea Maginot, que albergaba en el pasado la mayor artillería en Alsacia.
6) Obernai
Al entrar en la ciudad, inmediatamente sentirás la atmósfera de Alsacia. Esta ciudad es de las más típicas de la región gracias a su arquitectura y su gastronomía. De hecho, no en vano a Obernai la llaman «la ciudad del chucrut». Podrás ver las murallas que defienden la ciudad, así como ciertas torres que aún se conservan. La visita a la Plaza del Mercado de Obernai es esencial, allí está el histórico ayuntamiento, el campanario y una torre cuadrada con influencias del Renacimiento en su arquitectura.
7) Wissembourg
Wissembourg es una ciudad acogedora que transporta a sus visitantes a una época medieval. Además de la abadía de San Pedro y San Pablo, que alberga el vitral más antiguo de Alsacia, Wissembourg posee un impresionante patrimonio arquitectónico. Te recomendamos que pases por el Ayuntamiento y la Casa de la Sal.
Por cierto, ¿conoces la leyenda del Padre Azotador? Se dice que es un personaje malvado que acompaña a San Nicolás. Mientras este reparte regalos a los niños buenos, el padre Azotador (o Fouettard) da azotes a los desobedientes. ¡No le falta el toque folclórico a esta región!
8) Neuf-Brisach
Está a solo 5 km de la frontera alemana y del Rin. Tu visita a este pueblo es imprescindible, pues esta ciudad fortificada se considera la culminación de la obra del famoso marqués de Vauban. Está declarada como Patrimonio de la Humanidad. Impresiona verla desde arriba, pues sigue un patrón perfecto de ciudad octogonal, con un diseño de fosos y baluartes muy característico.
9) Ribeauvillé
Ribeauvillé es una encantadora ciudad situada entre viñedos y montañas que ha mantenido su patrimonio histórico. Los amantes de la historia se lo pasarán en grande disfrutando del magnífico patrimonio cultural de la ciudad. De hecho, Ribeaupierre (familia que se asentó en el pueblo en la Edad Media) construyó 3 castillos, cuyas ruinas aún sobreviven hoy. Los castillos de Saint Ulrich, Girsberg y Haut-Ribeaupierre son accesibles a través de una ruta de senderismo pos la ladera de la montaña. Pero esto no es lo único cosas que ver en Ribeauvillé. Nuestra recomendación es que vayas al Ayuntamiento, a la Torre de los Carniceros y la Casa de los Ménétriers. Otra buena razón para ir a Ribeauvillé son sus festividades, incluida la «Pfifferdaj», la fiesta de los Ménétriers que se celebra a principios de septiembre con carrozas y fanfarrias.
10) Kaysersberg
De la ciudad de Kaysersberg te encantará su herencia medieval, su iglesia, su puente fortificado y los restos de su castillo. Este es sin duda uno de los pueblos más bellos de Alsacia y uno de los más típicos, con sus calles empedradas y sus casas. Si vas a Kaysersberg para fin de año, no puedes perderte el maravilloso mercado navideño que reúne a turistas y locales cada año. Debes saber que Kaysersberg también fue elegido Pueblo favorito de los franceses en 2017. Esta región triunfa entre los habitantes de nuestro país vecino.
Ya ves cómo son de bonitos los pueblos de Alsacia. Aunque también tienes que saber que Francia te puede ofrecer mucho más. Por ejemplo, los pueblos de los Alpes son una pasada, no dudes en visitarlos durante unas vacaciones de invierno.
